lunes, 25 de enero de 2010

Ayer volví a octubre

Cuando escuché la alineación que saltaba ayer al verde de Chamartín comenté con el amiguete que vi el partido que volvíamos al mal de jugar sin bandas (os parecerá mentira, pero también comentamos qué nos tendría preparado Pérez Lasa). Mis peores pronósticos se cumplieron y el Madrid sufrió una involución haciéndome retroceder unos meses atrás, allá al mes de octubre, con el mismo juego de conducciones infinitas del balón, superpoblación en la frontal del área rival, facilidad en la marca de nuestros delanteros y un Xabi Alonso desesperado, con el cuello roto de mirar y mirar y no saber a quien pasar.

El único que puso luz a la oscura noche fue un Guti soberbio que era el único que intentaba dar sentido a los ataques apoyándose, mucho, en las subidas de Arbeloa, que ayer estuvo sensacional, y en las de Ramos, que no estuvo peor. Lo demás fueron destellos de la calidad enorme que atesoran los jugadores, como el primer gol, pero que se diluye a lo largo de los 90 minutos por culpa de un sistema inexistente o incomprensible cuando se plantea un partido como el de ayer. A Pellegrini no le gustó el juego del equipo. Al menos no nos engaña. Pero ¿sabrá por qué es? (casi que podría haber copiado en esta entrada aquella del 4-2-2-2-2-2…)

El Málaga no es un equipo que en la actualidad nos pueda ni deba plantear problemas. Terminar el partido con un 2-0 ayer fue pobre. Un conjunto un poco apañado nos lo hubiese puesto muy difícil. La semana que viene vamos a Riazor y sin Cristiano, cuya explosividad necesitamos. En Valencia ganamos sin él haciendo un gran partido, pero tampoco está Higuaín, y que nos falten los dos ya es preocupante. Porque a Benzema de vez en cuando se le ven maneras, sobre todo cuando sale del banquillo, pero está muy tierno para ser la referencia atacante de este Real Madrid. En La Coruña nos encontraremos a un equipo que jugará con el plus de motivación de enfrentarse al Madrid, como todos los equipos, y que además lo está haciendo muy bien. El otro día me paré a ver casi todo el partido contra el Bilbao y me gustó mucho como tocaban el balón, buscaban los espacios y como ¡¡usaban las bandas!! Sin duda será una buena piedra de toque para ver en que nivel real se encuentra el RMCF en la actualidad. Sin margen de error en Liga y a 15 días de Gerland.

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