jueves, 19 de septiembre de 2013

Gol mil

Pahiño
El 10 de febrero de 1929, Morera abría la cuenta goleadora del Real Madrid en el estreno del campeonato nacional de Liga.  Fue el inicio de un largo historial goleador del club más laureado en España. Pasaron veintiún años para alcanzar los mil goles en Liga. Bonita cifra de una carrera que nos conduce hasta los 5475 tantos de la actualidad.
 
Sería en el año 1950, el 5 de noviembre, cuando se alcanzó el millar. Además el escenario contribuyó a darle más mística a la hazaña. Fue en San Mamés, La Catedral, frente al Athletic de Bilbao de los Zarra, Gainza, Artetxe,... El Real Madrid se presentó con Juan  Alonso en la portería, Navarro, Hon, Miguel Muñoz, Oliva, Narro, Montalvo, Molowny, Arsuaga, Macala y Pahiño, siendo precisamente este último, Manuel Fernández Fernández, "Pahiño", quien hizo el tanto mil.
El Madrid se llevó la victoria de la capital vizcaína con un 2-5 inapelable en el marcador. Se adelantaron los locales por mediación de Artetxe. Macala con 2 tantos en 6 minutos puso por delante al RMCF, pero Gainza igualaba el partido. En 6 minutos mágicos, del 72 al 78, Pahiño conseguía el tercer y quinto gol, habiendo anotado antes el cuarto Arsuaga. Fue con el quinto gol, logrado por el gallego, con el que se alcanzó la cifra, vitoreada entonces, muy alejada ya, número 1000 en la historia del Real Madrid Club de Fútbol.
 

jueves, 12 de septiembre de 2013

The Damned United

Probablemente la mayoría de los lectores de este blog ya hayan disfrutado de esta película, pero no por eso voy a dejar de recomendarla, por si algún despistado se la ha perdido. Hará un año aproximadamente (puede que más), en La 2 de TVE emitieron The Damned United. Quien estas líneas escribe no llegó a tiempo de empezar a verla, por lo que decidió dejarla para mejor ocasión y disfrutarla de principio a fin. Cual fue mi sorpresa cuando a la mañana siguiente las redes sociales hervían de comentarios positivos respecto al largometraje. Periodistas, aficionados la fútbol, cinéfilos y amigos no dejaban de comentarla y elogiarla. No podía esperar más. Vi que en la biblioteca de mi barrio estaba y me abalancé sobre ella. Sabia decisión.
 
Basada en la novela de David Peace The Damned Utd, el director Tom Hooper traslada a la gran pantalla la vida del entrenador Brian Clough (interpretado por Michael Sheen) cuando fichó por el Leeds United. Va alternando la llegada a su nuevo club con su experiencia vivida cuando dirigió al Derby County, equipo que llevó desde las últimas posiciones de la segunda división inglesa hasta las semifinales de la Copa de Europa. La película no toma el fútbol como eje central de la trama. Más bien es una historia muy íntima, en la que se ensalzan las relaciones personales del entrenador; de fuerte carácter y firmes convicciones que le conducen en ocasiones a la testarudez. Su personalidad se dirige en dos direcciones: la relación con su ayudante y amigo, Peter Taylor (Timothy Spall), y con su odiado Don Revie (Colm Meaney), predecesor en su cargo al frente del Leeds y seleccionador nacional inglés. Lo podemos resumir en amor-odio y como canaliza sus sensaciones y sentimientos, tanto en la victoria como en la soledad de la derrota.
 
Es complicado encontrar en las filmotecas películas relacionadas con el fútbol y de un mínimo de calidad. Parecía que el deporte rey y el cine eran como el agua y el aceite frente a otros más agradecidos para las cámaras, como pueda ser el boxeo (Toro salvaje, Alí). Claro, tal vez la cuestión era encontrar una personalidad atractiva, fuerte e interesante que llevar a la gran pantalla, más allá del escenario deportivo que se quiera escoger. La figura de Clough parece encajar a la perfección. Borracho, arrogante, sarcástico, ambicioso. Un cóctel muy interesante. A esto hay que sumarle el ambiente futbolero de los 70 (en estas cosas nos fijamos los carcas romanticones), con el propio de las islas británicas, lo que le añade el atractivo del efecto visual.
 
Sin dudarlo, recomiendo esta película a los lectores que no hayan podido disfrutarla
 

viernes, 6 de septiembre de 2013

1986-1987. La Liga de "Play Off"

El equipo salta al césped del Bernabéu el último partido de la temporada frente al Español.
Ya son campeones.
El pasado mes de agosto salió una noticia sin mucha fuerza, en la cual se decía que Villar baraja un sistema de competición basado en un Play-Off final para intentar aumentar la competitividad de la Liga y reducir así distancias entre RMCF y Barza con el resto de equipos. Realmente a saber qué fundamentos tienen esa noticia, de donde la han sacado, qué tiene de verdad y qué de mentira. Ya se sabe como se las gasta la prensa a la hora de escribir un titular y dejarlo ahí, en el cementerio del olvido de las noticias falsas y/o sin sustancia. Pero al menos esta ha servido para dar pie al siguiente artículo en el blog, ya que de ser cierto no sería la primera vez que se disputa con un sistema similar, el cual fue un fracaso rotundo.
 
Hay que remontarse a la temporada 1986-1987. Se conoce como la Liga del Play-Off, pero no es del todo acertada la denominación. Un Play-Off se compone de eliminatorias directas, a uno o varios partidos, donde el perdedor queda eliminado y el vencedor pasa de ronda. En el caso del campeonato 86-87, no fue así. El formato consistió en dividir la competición en dos fases. La primera fue la habitual; los 18 equipos se enfrentan a lo largo de 34 jornadas. A continuación, los mismos 18 equipos se dividían en 3 grupos de 6. Los 6 primeros se disputaban el título liguero; los 6 últimos luchaban por eludir el descenso; los 6 que ocupaban la zona media de la tabla peleaban por una oportunidad de participar en la Copa de la UEFA. Esta fase de grupos también se disputaba a modo de liguilla, enfrentándose todos contra todos dentro de sus respectivos grupos.
 
El Real Madrid acabó ganando esta Liga tan peculiar y que daba opciones al sexto clasificado de hacerse con ella. Si se hubiese hecho por método acostumbrado, las 34 jornadas de aquel entonces, el Madrid también hubiese añadido el trofeo liguero a sus vitrinas, dejando segundo al Barcelona con dos puntos de diferencia. La igualdad durante toda la fase se plasmó también en los enfrentamientos directos entre los máximos rivales. En la octava jornada, disputada en el Bernabéu el 8 de octubre del 86, el Madrid y Barza empataron a 1 con tantos de Pedraza por parte de los culés y Hugo Sánchez de los merengues. El 31 de enero se jugó la vuelta, correspondiente a las jornada 25. El Madrid perdió 3-2, 'hat-trick' de Lineker, Valdano y Hugo Sánchez. Estuvo a punto de empatar el RMCF, que empezó perdiendo 3-0, pero al final no pudo ser en un partido muy polémico donde un objeto lanzado desde la grada llegó a alcanzar a Buyo. En los Derbys de la capital, la ida también acabó empate a 1 en el campo del Manzanares, el 7 de diciembre del 86. Landáburu y Hugo Sánchez fueron los artífices de los tantos. La vuelta, el 26 de marzo del 87, estuvo marcada por el homenaje que se realizó a Vicente Calderón, presidente rojiblanco recientemente fallecido. El partido concluyó con un 4-1 inapelable para el Madrid, con tantos de Sanchís, Martín Vázquez por partida doble, y Butragueño.
 
Así se llega al 4 de abril, día que se terminó la primera parte del campeonato con un 0-0 en Sarriá frente al Español. El Real Madrid afrontaba ahora la fase definitiva y que convertiría a esta edición en la más larga de la historia de la Liga. Las novedades que presentó el Real Madrid a principio de temporada fueron las de Paco Buyo, que llegó del Sevilla; Mino, procedente del Sporting de Gijón; Solana, que sube del Castilla; y Pardeza, quien es repescado. Además hay que añadir la incorporación de Milan Jankovic, que vino a reforzar al equipo en la recta final del campeonato. Su fichaje se produjo porque se dio de baja a Valdano, quien había contraído la hepatitis B, precisamente jugando contra el yugoslavo en la eliminatoria que enfrentó al Madrid con el Estrella Roja. A la vuelta del partido en Belgrado toda la plantilla se sometió a unos análisis para verificar que no se había producido contagio alguno. De los jugadores solo Valdano, pero el doctor Herredor también fue apartado del equipo al contraerla. Curiosamente él anunció, junto a Ramón Mendoza, los motivos de la baja de Jorge Valdano antes de saber que él también la tenía. La plaza de extranjero, pues, que dejó libre el argentino, la ocupó el jugador que había llamado la atención al cuerpo técnico en la eliminatoria. (Sobre Jankovic no me extiendo más que se está cociendo una entrada que se publicará en las próximas semanas).
 
Al tratarse de una temporada atípica y con más partidos que nunca, Leo Benhakker, entrenador aquel año, ideó junto con sus asistentes un plan específico de preparación. Benhakker declaró en su día que no veía la temporada en dos fases, si no como "un campeonato de 44 partidos. La pretemporada fue muy tranquila, con una preparación física sin forzar la máquina. Hemos buscado algún descanso más en los meses de diciembre y enero, sobre todo para los mundialistas Míchel, Butragueño, Camacho y Chendo. También hemos estado una semana en Marbella para refrescar un poco la máquina. Siempre enfocado a llegar al mes de junio a tope".
 
Así se encaraba la liguilla final a la que accedieron el Real Madrid, Barcelona, Sporting de Gijón, Mallorca, Zaragoza y Español. El primer encuentro que jugó el RMCF fue en casa contra el conjunto blaugrana con empate a cero. El resultado fue justo, pues el Barza no jugó a nada y parecía conformarse con el empate; mientras que el Madrid 3 días antes se había enfrentado al Bayern con la eliminación aún presente y fue incapaz de reaccionar. En la segunda jornada sí llegó la primera victoria. Concretamente fue en El Molinón, contra un Sporting cuyo centro del campo, liderado por Joaquín, era considerado por el entrenador madridista como el mejor de España. Fue un 0-1 con tanto del debutante Jankovic a pase de Míchel.
 
El Madrid despegó con dos victorias consecutivas en casa. En el tercer encuentro el Mallorca sucumbió ante los tantos de Gordillo, por partida doble, y Martín Vázquez. Este 3-0 demostró que el equipo de nuevo había cogido el ritmo. Se confirmó una semana después con el 2-1 al Zaragoza. Abrió el marcador Pardeza, para ser igualado por Señor nada más comenzar el segundo tiempo. De nuevo Pardeza puso las cosas en orden. En este partido Benhakker destacó un mal que aseguró que acompañó al equipo durante toda la temporada, que cuando juegan muy bien en la primera parte se relajan en exceso en la segunda. De ahí que no se cerrase antes el marcador y se sufriese hasta el final.
Once titular en un partido de la primera fase del campeonato.
 
Para cerrar la primera vuelta del "Play Off" se visitó Sarriá en la quinta jornada. Se dice que fue el día clave para hacerse con el campeonato. El conjunto blanco se puso 0-2 gracias a los goles de Hugo Sánchez, el segundo precedido de una asistencia de un Emilio Butragueño que reaparecía tras una baja por lesión. El partido parecía decidido, pero en 3 minutos los blanquiazules igualaron el marcador con los goles de "Pichi" Alonso de falta y Zúñiga. Cuando parecía que tocaba volver con un empate a la capital, Míchel envió a la red el balón que golpeó desde fuera del área en el minuto 90. Locura desatada por una victoria con la que ya no se contaba. Una semana después tocaba volver a la ciudad Condal para visitar el Camp Nou. Gracias al gol de Míchel, se hizo más llevadera la derrota por 2-1 (Roberto y Lineker; Hugo Sánchez) con le conjunto azulgrana en la sexta jornada. El empate estuvo muy cerca ya que el segundo tiempo fue de dominio madridista, pero nunca llegó.
El Sporting en el Bernabéu y sin opciones desde el minuto 1, cuando marcó el primero de 4 Hugo Sánchez. El mexicano en dos ocasiones más y Martín Vázquez cerraron el marcador. Benhakker opinó que fue el mejor partido que había visto a su equipo ese año. El mismo resultado se dio en la octava jornada en el Luis Sitjar contra el Mallorca. Butragueño, Martín Vázquez, Míchel y Sánchis dieron la victoria que dejaba el título liguero a un paso de las vitrinas madridistas.
 
Y así llegamos al día del alirón el 15 de junio de 1987. El Madrid se desplazó a La Romareda. El partido se disputaba simultáneamente con el del Barcelona en Gijón, ya que de ambos resultados dependía que hubiese o no campeón. Realmente hubo un desfase de horarios gracias a la picardía de Paco Buyo, ya que dijo al árbitro que sus botas estaban defectuosas y que necesitaba cambiarlas. Debido a esta triquiñuela se empezó con cinco minutos de retraso para ir recibiendo noticias de Asturias y a la vez poner nerviosos a los catalanes con lo que les pudiese llegar a ellos. El Madrid comenzó jugando su mejor fútbol y adelantándose en el marcador con 2 tantos de Butragueño. Aún así, el equipo se relajó permitiendo al Zaragoza asediar la portería blanca. La sentencia llegó en el minuto 80 con el tanto de Solana, haciendo inútil ya el gol que anotó seis minutos después Pineda para dejar el 1-3 final. La euforia se desató cuando concluyó el partido y llegó la noticia de que el Barcelona había perdido en El Molinón (1-0; gol de Zurdi). La combinación de ambos resultados hacía campeón al Real Madrid. Camacho, en muletas, saltó corriendo al césped junto a sus compañeros para la celebracíón.
 
Esto convirtió el último partido de la temporada, en casa contra el Español, en una fiesta. Pasillo, homenajes y entrega de la copa. El 2-2 final (Hugo Sánchez y Solana por el Madrid; Alonso y Mauri por el Español) fue una anécdota en un día de disfrute madrididista, como tantos y tantos.
 
Este es el resumen desde el punto de vista madridista de lo que fue la Liga del Play Off. Sin lugar a dudas, es un formato que no desearía lo más mínimo en la actualidad. Pero supongo que si realmente se plantea, lo que hará que se decanten o no por hacerla será el dinero.