Lo de las derbis de la capital ya empieza a ser un bucle que se repite año tras año. Mes tras mes, en esta temporada. Hace un par de temporadas un amigo, madridista, me comentó en la previa de un derbi en el Bernabéu que cada partido que les ganamos se acerca más la derrota contra los colchoneros. Tal vez eso sea un consuelo para los indios bastardos, pero la realidad es la que es y no ofrece lugar a dudas. Los enfrentamientos entre los que acampan en el Manzanares y el Rey de Europa se saldan con resultados similares año tras año. Encuentro tras encuentro.
Ya no es necesario tomarse el partido de máxima rivalidad con una motivación extra. Nadar y guardar la ropa. Venimos de clasificarnos a cuartos de la Copa de Europa tres día antes y nos quedan unos buenos puertos que subir en los meses que quedan de competición. Por eso Mou se permitió dar descanso a algún jugador, Di María, y los jugadores frivolizar con el resultado. Jugábamos con un equipo menor y como tal le tratamos. Al final un poco de sufrimiento por no haber cerrado el resultado en el primer tiempo aprovechando las múltiples ocasiones que tuvimos a la contra. Pero los 90 minutos se cerraron con la tónica de los últimos... ¿cuántos derbis ya?
Sí se que este año, cuatro derbis, cuatro humillaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario