miércoles, 19 de octubre de 2011

No me joda, Marqués.

Vicente del Bosque es un hombre de la casa que tiene el aprecio de los madridistas. Una persona correcta, humilde y que rehuye de la polémica (pero de verdad, no como aquel personaje de sexualidad por definir que vive en “un país chiquitito ahí arriba”).

La forma que tuvo de salir del Club fue bochornosa. Junto con Fernando Hierro, el marqués de Del Bosque (manda huevos), fue vilipendiado por Jorge Valdano y Florentino Pérez, gente que no conoce ni de formas ni de honradez. Todo madridista de bien no comprendió como quien acababa de darnos una Liga en el Calderón era despedido convirtiendo un alirón en un funeral. “La búsqueda de la excelencia”, decía el 'Ñoflas', quien nos encasquetó a Queiroz, segundo de Ferguson por aquel entonces.

Que el actual seleccionador sienta animadversión y desprecio por el actual presidente es lógico y comprensible. Ya somos dos, como sabrán los lectores habituales de este blog. Pero del Bosque está teniendo un pequeño problema de límites al no saber distinguir dónde se acaba Florentino y dónde empieza el Real Madrid. Esta casa de la que todos los madridistas formamos parte fue la que encumbró al entrenador salmantino como jugador y entrenador. Él nos dio mucho, por supuesto, como madridistas y españoles, pero más le dio el RMCF a él. Si está donde está y si ha conseguido lo que ha conseguido es gracias al Madrid.

En la última Asamblea de socios compromisarios se votó entre los asistentes condecorar a Vicente del Bosque con la insignia del Club, al igual que a Rafa Nadal y Plácido Domingo. A partir de ahí una espiral polémica, esa de la que le gusta huir, a envuelto el homenaje que se le quiere realizar al insinuar que no quiere acudir y ahora, tras hablar con Butragueño y consultar a su entorno, jugar a la ambigüedad sobre su asistencia y las fechas en caso de acudir. A mí como madridista me parece una falta de respeto que un hombre al que considero de la casa quiera deshonrar la máxima condecoración que podemos ofrecer por sus diferencias personales con el 'Ñoflón'. Quiero pensar que su acritud va dirigida sólo a él y que no es para con el madridismo, quiero pensarlo, pero no cae en la cuenta de que con su actitud a quien falta al respeto es al público que lo encumbró. Si quiere fastidiar a nuestro presidente acude al acto, recoge la insignia, saludas al respetable y le estampas la insignia en la cara destrozándole las gafas y arrancándole de cuajo esa sonrisa falsa y forzada que tenemos que aguantar en cada acto. Entonces mi aplauso sí que sería más contundente y le propondría para otro homenaje.

Pero, para mi pesar, si damos un salto de atrás en el tiempo de dos meses nos encontraremos con las palabras “yo soy muy del Madrid y del Barcelona” que dijo Don Vicente. “No puede ser, no puede ser”, me repetía una y otra vez cuando leí las declaraciones. Si quiere ser políticamente correcto y no faltar a nadie ni mostrar favoritismos por el cargo que ocupa en la actualidad que hubiese dicho “soy de la selección española”. Y punto. No da carnaza a la prensa, no falta el respeto a nadie, no traiciona, creo, su ser y sentir y no muerde la mano de quien le dio de comer. No sólo faltó el respeto a nuestra afición; también a la del Sevilla, Bilbao, Valencia,... que si bien me importan poco esas aficiones, no consiguió el efecto que quería, supongo, el seleccionador de dar gusto a todos sus jugadores, ya que la selección española la componen jugadores de más de dos equipos. Pero sin duda fue una granada lanzada a Chamartín que no creo que nos merezcamos los que allí habitamos.

No quiero que Vicente del Bosque entre en mi lista particular de personajes 'non gratos'. De momento no es así. Pero habrá que seguir con atención la evolución de sus declaraciones y de sus actos. Deseo que sólo se trate de un par de errores, el primero por la premura que exige una rueda de prensa que puede conducir a no pensar bien la respuesta; y la segunda en el tiempo, debido a la aversión a la figura de nuestro actual, por desgracia, presidente. Prefiero recordar al jugador que vestía nuestra camiseta blanca impoluta, al entrenador que nos dio 2 Copas de Europa entre otros trofeos y al seleccionador nacional que nos puso en la cima del mundo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Del Bosque es un caballero y un Madridista, cosas que no es ni el Noflas ni el resto de tribu.

Mas de 30 años en el RMCF no pueden ser cuestionados por unas declaraciones neutras, a preguntas zafias, cuando es seleccionador.

Respecto a la insignia de marras, el que le ha puesto en la diana a sido el Noflas, haga lo que haga Vicente del Bosque le habra puesto e un aprieto.

VUELTA A LOS VIEJOS VALORES